Antonio Tiberi y la presión de ser el 'nuevo Nibali': "Esto va muy rápido, pero a mí no me afecta"

Italia necesita una nueva estrella. Tras años de espera y nostalgia por las gestas de Vincenzo Nibali o Marco Pantani, el país encuentra en Antonio Tiberi (Frosinone, 24 de junio de 2001) al heredero más prometedor. Con solo 23 años, este corredor completo y ambicioso es la gran esperanza de los ‘tifosi’ para reverdecer laureles en la Corsa Rosa.

Tiberi, que ya fue quinto en el Giro de Italia 2024, llega a esta edición respaldado por una temporada que lo consolida entre los mejores del pelotón. “¿Mejorarlo? Claro que sí. Creo en ello. Cada año es distinto y pueden pasar muchas cosas en 21 días, pero me he preparado para luchar por todo”, explicaba a MARCA durante las primeras etapas de esta Corsa Rosa, con la serenidad de quien sabe que está preparado.

Una temporada para confirmarse

El corredor del Bahrain-Victorious ha demostrado en este 2025 una notable solidez. Fue tercero en la general de la Tirreno-Adriático, firmando actuaciones notables en montaña (5º en Frontignano y 11º en Pergola), y mostró también buen rendimiento en la contrarreloj inaugural (4º en Lido di Camaiore). Luego sumó protagonismo en la Volta ao Algarve (3º en la crono final) y en el Tour de los Alpes, donde solo una caída le obligó a abandonar en la segunda etapa tras empezar con un 19º puesto. En lo que va de Giro 2025, Tiberi ha sido protagonista desde el inicio: 12º en la primera etapa, 18º en la crono de Tirana, y 6º en el primer final en alto en Tagliacozzo. De momento, Antonio sigue activo en la general. En su equipo, escuderos de lujo como Pello Bilbao, confían en él. "Tiene capacidad y tranquilidad para poder estar ahí arriba", dijo a este medio en la 'Grande Partenza'.

“La del Colle delle Finestre me obsesiona”

Aunque prefiere esfuerzos largos, no descarta las cronos: “Me gustan, aunque en este Giro quizá habría preferido una un poco más larga. Aun así, ya en las dos primeras se puede marcar diferencia. Intentaré ganar segundos desde ahí”. Entre las etapas del trazado, hay una que ocupa su mente: “La del Colle delle Finestre. Me inspira muchísimo. No la he subido aún, pero me han contado maravillas. Es una jornada que tengo marcada en rojo”.

No le asusta la presión

Tiberi, tercero en la general a 1'30'' de Del Toro, sabe que carga con las esperanzas de un país entero, pero lo vive con naturalidad: “Es verdad que en el ciclismo actual todo va más rápido. La edad media ha bajado y se espera mucho de los jóvenes. Pero estoy aquí para eso, para competir, dar espectáculo y disfrutar. Si lo hago bien, el resultado llegará”.

El sueño está claro: “Subir al podio en Roma sería algo fantástico”. No lo dice como una quimera, sino como un objetivo al que aspira con trabajo, constancia y determinación. Con él, Italia vuelve a ilusionarse. Con ciclistas como Tiberi, Fortunato, Piganzoli o Ciccone, el ciclismo italiano tiene licencia para soñar. Los resultados empiezan a llegar y Tiberi quiere dar en este Giro "otro salto en mi carrera".