Los Suns son el equipo más caro en la historia de la NBA. Al inicio de esta temporada, la plantilla costaba más de 400 millones. De ellos, casi 225 eran de salarios y había que añadir casi otros 200 en penalizaciones. Tanta inversión, sin embargo, no se está traduciendo en victorias y sí en malos rollos.
El equipo es undécimo en la Conferencia Oeste con un balance de 29-33 mientras el ambiente está de lo más enrarecido. Jusuf Nurkic, enviado a los Hornets, reconoció que no se hablaba con el entrenador Mike Budenholzer, Bradley Beal estuvo en rumores de traspaso en el mercado invernal, Devin Booker no ha llegado a explotar con la megaestrella que se esperaba y Kevin Durant hace los números que corresponden a uno de los mejores anotadores puros de la historia, pero su liderazgo sigue bajo sospecha y podría salir el próximo verano tras otro proyecto frustrado.
Si a ninguno nos importara, nunca habríamos tenido cosas así. Demuestra que a los dos nos importa ganar
Como muestra de que las cosas están que arden en los Suns, en la victoria ante los Clippers (119-117), Durant dejó un feo gesto a su entrenador cuando se dirigía al banquillo para un tiempo muerto. Budenholzer le recriminó algo y le sujetó para intentar que le escuchara. El jugador le apartó el brazo, siguió andando y después se dio la vuelta mientras el técnico negaba con la cabeza en señal de frustración.
Remontada de 23 puntos
Acabado el partido, Durant resto importancia a ese momento. “Eso es lo que suele pasar cuando no conoces la dinámica de una relación. Ves algo en la televisión, obtienes una cita y promueves una narrativa. Como si Bud y yo no hiciéramos eso todo el tiempo...”, dijo la estrella, que hizo 19 de sus 34 puntos en el último cuarto (43-22 para los de Phoenix) para remontar un partido que perdían por 23. Al inicio del acto definitivo, la brecha era de 19 (76-95).
"Somos competitivos como dos individuos que quieren ver las cosas hechas de la manera correcta. A veces, no es la misma manera", explicó Durant, que cree que "si a ninguno nos importara, nunca habríamos tenido cosas así. Demuestra que a los dos nos importa ganar. Me alegra que la victoria vaya a barrer todas esas estupideces debajo de la alfombra”.
Además de los puntos de Durant fueron decisivos los 10 del base suplente Collin Gillespie, que metió dos triples clave en el tramo final. Con uno de ellos, a falta de 36 segundos puso a los Suns 119-114. Los Clippers aún tuvieron dos oportunidades de mandar el partido a la prórroga. Después de un tiro libre fallado por James Harden, Kawhi Leonard atrapó el rebote pero no pudo anotar. Ivica Zubac tampoco acertó con el palmeo. El pívot croata habría redondeado su gran noche, pues anotó 35 puntos, su récord personal en la NBA.
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