En una temporada marcada por los grandes fichajes, por las sorpresas y por la lucha hasta el último suspiro por conseguir los títulos individuales y colectivos, hay un futbolista que ha irrumpido con fuerza en la pelea por ser reconocido a final de año como el mejor futbolista del mundo. Ese futbolista es Ousmane Dembélé. El delantero francés ha firmado su mejor temporada hasta la fecha desde que debutó como profesional en las filas del Borussia Dortmund y su nivel, así como sus cifras, lo sitúan por méritos propios como el serio candidato a ganar el Balón de Oro.
A lo largo de la temporada 2024/25, el galo ha sido una de las piezas clave en el esquema del Paris Saint-Germain. El club francés, bajo la dirección de Luis Enrique, ha logrado cerrar una temporada histórica con la conquista de su primera UEFA Champions League. Su gran papel en la máxima competición continental ha situado a Dembélé por encima de otros aspirantes al Balón de Oro, como su compatriota Kylian Mbappé y el brasileño Raphinha. Según las apuestas de Betfair, la probabilidad de que Dembélé reciba el trofeo individual es del 73,53%, siendo el grandísimo favorito.
Unas cifras que hablan por sí solas
En la presente campaña, el francés ha disputado un total de 49 partidos oficiales con el PSG en los que ha firmado 33 goles y 15 asistencias. Sus números son el reflejo de un futbolista que ha alcanzado la madurez deportiva y una regularidad hasta ahora desconocida en su carrera. En la Ligue 1, ha jugado 29 partidos, marcando 21 goles y repartiendo 8 asistencias, lo que lo convierte junto a Mason Greenwood en el máximo anotador de la liga. Por su parte, en la UEFA Champions League, ha sido el gran protagonista del equipo con ocho goles y seis asistencias en los 15 partidos en los que ha participado. Además, en la Coupe de , título que también ha conquistado el PSG, disputó cuatro encuentros dejando tres goles y una asistencia, y en la Supercopa de Francia, fue decisivo también anotó el gol de la victoria de su equipo.
El factor Luis Enrique
Uno de los factores que mejor explican la transformación de Dembélé es el papel de su entrenador. Luis Enrique ha tenido un rol esencial no solo en la planificación táctica del equipo sino también en la recuperación del futbolista. Desde su llegada, el asturiano ha insistido en la importancia del grupo por encima de las individuales y ha hecho que todo el equipo trabaje como un bloque unido y compacto que se mueve al unísono. Empezando por el propio delantero francés, el PSG ha recuperado la verticalidad y el juego veloz, así como la presión alta que comienza en el área rival e impide a los contrarios acercarse fácilmente a la meta de Gianluigi Donnarumma. Además, para poder poner llevar a cabo dicho planteamiento y modelo de juego, el cuerpo técnico de Luis Enrique ha trabajado intensamente en la prevención de lesiones, una de las grandes asignaturas pendientes del jugador en sus anteriores etapas y gracias a una mejora en su estilo de vida Dembélé ha podido estar disponible en las fases claves de la temporada.
Comparativa con sus principales competidores
Si bien esta campaña no ha tenido un claro dominador en Europa, la carrera por el Balón de Oro se presenta abierta en los meses finales. Kylian Mbappé, que llegó al real Madrid con el objetivo de ganar una Champions que le es esquiva, ha terminado la temporada como Pichichi de LaLiga con 31 goles, pero lejos del nivel y del impacto mostrado por Dembélé.
Raphinha, por su parte, ha sido uno de los líderes de un FC Barcelona en crecimiento que ha terminado ganando la Supercopa de España, LaLiga y la Copa del Rey, y ha finalizado el año con 18 goles en la competición doméstica y 13 en la UEFA Champions League.
Sin embargo, pese a los buenos números de sus competidores, Dembélé no sólo ha sido clave con sus goles y asistencias, sino que ha ganado la primera 'Orejona' de la historia del Paris Saint-Germain y ya se postula para conseguir junto al club francés el Mundial de Clubes que se celebrará este mes de junio. Además, con la selección, tiene en el horizonte la fase final de la UEFA Nations League y contra España, en la semifinal de la misma, tiene la oportunidad de reafirmar su candidatura al Balón de Oro.
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