En la historia del Real Madrid muchos han sido los partidos que han definido las temporadas y que han marcado un antes y un después en la dinámica del equipo. Por eso, el encuentro de vuelta de las semifinales de la Copa del Rey que se vivirá en el Santiago Bernabéu frente a la Real Sociedad, puede ser uno de esos duelos que disparen al equipo y que le den una inyección de moral para el tramo decisivo de la temporada. O todo lo contrario.
Pero la gran noticia, más allá de la importancia del encuentro, es la confirmación de que Andriy Lunin, el portero de la Copa, será titular. Con un Thibaut Courtois que esta temporada se ha perdido ya varios partidos por lesión, Ancelotti vuelve a confiar en el guardameta ucraniano, quien ha respondido con solvencia cada vez que se ha puesto los guantes. Si bien algunos podían pensar que la portería blanca se le iba a quedar grande a Lunin, el ucraniano ha sabido estar a la altura de las circunstancias para sostener al equipo siempre que lo ha necesitado, como el año pasado en la UEFA Champions League.
Con él en el campo, el Real Madrid no siente la baja de Courtois, y opta a ganar todos los títulos. Según las apuestas de Betfair, el Real Madrid tiene una probabilidad implícita del 75,19% de vencer en su duelo frente a la Real Sociedad, lo que le daría el pase a la final de La Cartuja.
Una temporada atípica en la portería del Real Madrid
El Real Madrid también está viviendo una campaña atípica en lo que a la portería se refiere. Thibaut Courtois se ha quedado varios partidos fuera de la convocatoria por diferentes lesiones y molestias físicas, algo que ha obligado a Carlo Ancelotti a rotar en la portería y a confiar en un Andriy Lunin, que cada vez va ganando más peso dentro del equipo.
Hasta la fecha, el ucraniano ha disputado 11 partidos entre todas las competiciones, encajando 15 goles y dejando su portería a cero en cuatro ocasiones. En liga es donde ha disputado un mayor número de encuentros, cinco en total, siendo especialmente importante en partidos como el disputado ante Osasuna, donde dio una asistencia a Vinícius Jr. En segundo lugar, en la Copa del Rey, su competición, con hasta cuatro apariciones, y serán cinco tras el choque ante la Real Sociedad en la vuelta de semifinales, dejando la portería imbatida en dos ocasiones. Menos protagonismo ha tenido en Champions, donde la temporada pasada fue decisivo, disputando tan solo dos encuentros y encajando cuatro goles.
La gran oportunidad en una noche decisiva
La titularidad de Lunin en este partido no solo es una muestra de confianza de Ancelotti, sino también una gran oportunidad para el portero. En la memoria madridista sigue presente su gran actuación en la tanda de penaltis de la temporada pasada contra el Manchester City en la UEFA Champions League. Aquel día, el ucraniano detuvo dos lanzamientos y se convirtió en el héroe de la eliminatoria. Ante un tirador experto como Bernardo Silva, Lunin se mantuvo firme en el centro de la portería y no se dejó sorprender por el suave disparo del portugués. Minutos después, Lunin atajó el disparo del ex madridista Mateo Kovacic con una gran estirada hacia el lado derecho de la portería. Aquella noche Lunin demostró que, aunque la sombra de Courtois sea alargada, cuando se le necesita, responde con creces.
El dilema de Carlo Ancelotti
Ahora la pelota está en el tejado de Carlo Ancelotti en el hipotético caso de que el Real Madrid certifique su pase a la final de la Copa del Rey ya que tendrá que decidir si la final la disputa el meta ucraniano o el belga.
Por un lado, Courtois es una garantía en los partidos decisivos. Su experiencia en finales y su capacidad para ser determinante en los momentos clave le dan una clara ventaja sobre su competidor directo. Sin embargo, las lesiones que lo han apartado en varios momentos este año, de las que podría recaer en cualquier momento, y la confianza de Lunin en esta competición, juegan en su contra.
Por otro lado, Andriy Lunin ha demostrado estar listo para asumir el reto de ser el portero titular del Real Madrid. Ha mantenido la portería segura durante la ausencia del belga y ha sabido manejar la presión en los partidos importantes. Si es él quien lleva al equipo a la final, muchos pensarán que lo justo será que Ancelotti apueste por su continuidad, más si cabe, después de lo ocurrido el pasado año en la final de Wembley, que acabó con Courtois bajo los palos y Lunin en el banquillo.
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