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David Vidal, en su habitual tono irnico, y tras recordarle que su equipo es el tercer mejor equipo durante las ltimas ocho jornadas ligueras, contest que le "deberan haberme llamado antes" para que hubiera llegado antes "en lugar de que siguiera pescando". Vidal, ante un hipottico tercer puesto si se computan las ltimas ocho jornadas, convino que "deberan haber hecho fuerza para que hubiera venido aqu en lugar de que siguiera pescando".

Con esto aluda a una de sus aficiones favoritas, la pesca, que practicaba en Cdiz, donde tiene fijada su residencia. Siguiendo con su rutinaria simpata, el gallego prometi que "el Albacete estar salvado en la ltima jornada", en la que se enfrenta al Cartagena. "Pero usted quiere matarme a m? Quiere que me quede ms chupado que la pipa de un indio?", se pregunt, tras desvelar que desde que est aqu ha "perdido seis kilos".

"En la ltima jornada espero que, si Dios quiere, ya estemos salvados", subray. Ya ms en serio, el tcnico gallego incidi en que "la aficin vuelva a estar con los jugadores". "Yo llevo 28 aos entrenando en Primera y Segunda y puedo aguantar la presin, pero a ellos no hay que presionarles y apelo a que la gente acuda al campo a animarles". Muy en cuenta tuvo al Crdoba, al que recibe este sbado en el Carlos Belmonte, y al inquilino de su banquillo, al que pirope.

"Viene el equipo con el mejor entrenador de Segunda a baln parado, Lucas Alcaraz", recalc, por lo que solicit a sus futbolistas mucho cuidado en las jugadas de estrategia. Segn sus cuentas, al cuadro andaluz, que acude a Albacete con 49 puntos, "le falta un punto para llegar a la salvacin". "Estoy convencido de que no nos regalar nada y buscar ese punto que le falta".

Cuestionado por s sus futbolistas saben jugar con el marcador a favor, tras desperdiciar a domicilio varias ventajas, aclar que "el otro da contra el Levante hubo fallos en las vigilancias ofensivas" y ment a Antonio Hidalgo y Miguel Nez que "deban soplarle en el cocoroto a los delanteros rivales, Rubn o Rafa Jord. Seguimos en la vertical del precipicio. No nos podemos equivocar, ni los jugadores en el campo ni yo en el banquillo a la hora de poner a uno u otro jugador", concluy.