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En un partido de baloncesto horrible, infame y todos los calificativos que se les ocurran, Sergio volvi a demostrar que tiene nivel NBA (12 puntos y dos asistencias) a pesar de su justificado cabreo y Rudy se aburri un da ms. Hubo paliza de los Blazers, claro.

Si no fuera porque en el partido haba dos espaoles, el Blazers-Knicks hubiese sido el peor entretenimiento sobre la faz de la tierra. Imaginen el partido ms aburrido que se les ocurra y multiplquenlo por 10. Culpa, toda ella, de unos New York Knicks que una vez ms fueron una banda criminal con un baln de baloncesto de por medio.

Sergio acab el partido visiblemente enfadado, al verse en medio de una feria en la que ninguno de sus jugadores no slo no se la pasaba, sino que no pretenda ms que engordar sus nmeros sin el menor rubor y sin gana ninguna de jugar al ba-lon-ces-to. Normal. Pertecenecer a ese equipo en estos das en los que decide no comparecer debe ser desesperante. Sus tmidos intentos de jugar y hacer jugar fueron gritar en el desierto.

Eso s, por lo menos el espaol demostr que es, de lejos, merecedor de un puesto en este equipo el ao que viene y se dio el gusto de clavar algunas canastas a su 'amigo ntimo' Jerryd Bayless. Su salida, con dos fulgurantes aros pasados, fue casi lo nico potable que hicieron los Knicks. Lo que s es una verdad absoluta es que el canario fue el nico jugador que quiso pelear y disputar un partido de baloncesto con todas sus letras.

Rudy se aburre, y de qu manera
Lo de Rudy es distinto: es un jugador al que su entrenador limita dentro de un sistema ganador. Es lgico que est harto, porque es jugador para mucho ms, pero est dentro de un grupo que lucha por ganar.

Un da ms, Rudy se coloc en una esquina y esper. En cada ataque. Es irable que, estando tan poco implicado en el juego ofensivo, sea capaz de poner tanta intensidad defensiva. Hace lo que Nate McMilaln quiere y lo hace bien. Si acierta en los tiros, hace nmeros; si no, no. Hoy toc el no: 1/5, tres puntos en total.

La sensacin es que con eso, su entrenador est contento. Bueno para su equipo, malo para la carrera de Rudy Fernndez. Cuando acabe esta temporada tendr que exigir movimientos, porque todos sabemos (y en Portland lo supieron la pasada temporada y en algunas fases de sta) que Fernndez es mucho ms jugador que 'eso'.

Y el partido? Apuntemos un detalle: la canasta que supona el 95-65 para los Blazers, la ltima del tercer cuarto, fue la primera en la que los Knicks circularon el baln con sentido y encontraron un tiro decente. Anotaron. No lo volvieron a hacer.

Los Blazers, con Batum haciendo lo que Rudy el ao pasado, ganaron por 28 puntos. La ventaja lleg a ser de 36 (80-44, 109-73, 111-75) y no fue ms proque Portland juega maana y haba que dar descanso a los buenos para que entrasen los del fondo del banquillo. Portland tiene cosas ms importantes que hacer que jugar contra los Knicks. No es falta de ganas de teclear: es que no hay ms que contar.